En el interior de Córdoba, una madre decidió que su hijo categoría 2008 dejara el club porque no lo ponían. La gran pregunta: ¿fútbol competitivo o fútbol formativo?

Un caso en el interior de Córdoba volvió a exponer la problemática y la disyuntiva que se plantea en el fútbol infantil: ¿competitivo o formativo?

El caso sucedió en el Club Atlético de la localidad de Almafuerte, en el que una madre retiró a su hijo (del cual evitaremos citar su nombre) de la categoría 2008 ya que no era citado para jugar cada fin de semana.

En una carta concisa, esta mamá explicaba la situación y ponía sobre la mesa esta compleja situación que envuelve a muchos chicos que siendo niños no tienen la oportunidad de jugar.

Ante esta situación y el gran rebote que tuvo en las redes sociales, el propio Club Atlético contestó avisando que hará un pedido a la Liga de Río Tercero para que este tipo de categorías sean formativas y no “por los puntos”.

Aquí, el texto de la madre y luego el posteo del club:

“El día 25/04/2.018, junto a mi esposo decidimos retirar a nuestro hijo “X” de Club Atlético Almafuerte (Categoría 2.008).- Siento necesidad de comunicar los motivos porque tengo la sensación de que se trata de una práctica extremadamente dañina que lleva muchísimos años sucediendo en distintos clubes y que como tantas otras cosas que están mal en nuestra sociedad, son consentidas como algo normal.-

Nuestro hijo tiene nueve años y este año recomenzó en la práctica de futbol.- Obviamente, se trata de un niño que no tiene la experiencia ni las habilidades futbolísticas de sus pares que llevan años en la práctica del deporte en ese mismo club, pero puedo asegurar que era altísimo el nivel de compromiso, entusiasmo, acatamiento a las órdenes impartidas, respeto y dedicación que ponía en todas y cada una de las prácticas (a las que jamás faltó).-

El técnico de la categoría, en reunión de padres a comienzo de año, nos informó que este año comenzaban a “jugar por los puntos”, razón por la que convocaría a un plantel estable de 8 o 9 niños e iría rotando a los demás para que todos tuvieran oportunidad de ser incluidos en los partidos.-

Nada de eso ocurrió. Convocó en forma permanente a una nómina de 14 o 15 niños virtuosos en el deporte, dejando de lado a los demás. Mi hijo solo fue llamado en una oportunidad en que el resto de los niños que habían sido convocados no podían ser llevados a Hernando por sus padres.-

Cuando mi esposo intentó hablar con él al respecto (aclaro que no fue para interferir en la formación del equipo sino para pedirle que incluyera a un grupo de niños que estaban en la misma situación de exclusión que nuestro hijo), el técnico solo respondió que él se debía al club y jugaba por los puntos, que como consecuencia de ello, jugaba con los que le rendían en la cancha (refiriéndose obviamente a los mejores).-

Entonces me pregunto: ¿cuáles son los valores que se manejan en las divisiones de futbol que entrenan a nuestros niños?

Desde la escuela y en la familia enseñamos a los niños que no se debe dejar a nadie de lado, que no se debe discriminar por ningún motivo a ninguna persona, que excluir al otro es una forma de discriminar, y resulta que desde la institución deportiva que debe contener a nuestros hijos, que debe enseñar el deporte y los valores –porque se trata de una etapa de formación-, se excluye a un niño, se lo deja de lado y se lo discrimina por no ser destacado en la práctica del deporte.-

¿Alguien imagina ver la carita de un niño de nueve años preguntando si lo convocaron a jugar con sus amigos en su equipo, y que se le llenen los ojitos de lágrimas al recibir una respuesta negativa?

Se trata de un niño, no de un adulto que juega en primera.- Es un niño lleno de ilusiones, de sueños, con ganas de ser parte de un equipo.- Pues bien, este técnico no respetó esas ilusiones, esos sueños y no le permitió ser parte de ese equipo.-

Si lo hubiera hecho inconscientemente sería una actitud bochornosa y condenable.-

Si lo hizo “por los puntos” se trata de un acto de una bajeza absoluta y que resulta imperdonable.-

En relación a la Comisión Directiva del Club, me permito decir que si no conocía esta situación pecó por omisión porque no podía ignorarla, ya que sucedía en el ámbito de su control, y si la conocía y no hizo nada, la actitud de indiferencia los convierte en cómplices.-

Respecto a la Liga Riotercerense de Futbol, huelga decir que en su poder están los listados de los niños convocados a todos los partidos por cada uno de los clubes, solo le hubiera sido necesario cotejar la lista de los convocados con la lista de los niños fichados para darse cuenta de la sistemática discriminación.-

Por último diré que resulta muy triste tener que retirar a un niño de la práctica del deporte en una institución por este tipo de accionar y si he decidido ponerlo en palabras y hacerlo público es porque espero que este sea nuestro granito de arena para que no siga sucediendo (en este ni en ningún otro club).-

Cuidemos la cabeza de nuestros pequeños, no olvidemos que están llenas de sueños e ilusiones.-